domingo, 20 de marzo de 2011

MENTIRAS QUE MATAN...


Antes que nada, debo confesar que, igual que la mayoría, estoy en contra de las dictaduras (de todas), estoy en contra de Gadafi y sus delirios autoritarios y déspotas y, sobre todo, estoy en contra de la MASACRE de un pueblo, sea el que sea. Estoy en contra de las guerras (las inicie quien las inicie y las termine quien las termine).

Sin embargo, también estoy en contra de la MENTIRA y de toda esa "pompa de jabón" políticamente correcta que nos cuentan e, incluso, de que repitamos lo que dicen los periódicos o los informativos o el gobierno sin antes analizar qué es lo que verdaderamente está sucediendo. Ya sé que es más fácil tomar lo que nos dicen sin necesidad de perder el tiempo en "razonar" lo que nos están diciendo o el suceso de los acontecimientos. Simplemente, porque es más fácil creer que no nos tratan como si fuésemos niños de colegio. Y además, no pasa aquí, en casa... así que para qué molestarse (tampoco es cuestión de ser hipócritas). Incluso, me molesta mucho la repetición cuando se da en una figura pública porque sí, los políticos siempre se escudarán en la paz y en el beneficio para la mayoría (aunque ya sepamos de memoria que es todo una falacia) pero y ¿los demás qué? Los demás, los que nos informan o nos entretienen, los que tienen la posibilidad de expresarse en voz alta frente a millones de personas ¿porqué insisten en ser "políticamente correctos"? ¿porqué insisten en decir lo que creen que queremos oír? Porque no sé ustedes, pero yo quiero que alguien se plante frente a una cámara y ¡me diga la verdad! Sí ya, ya escuché en más de una ocasión (bueno, dos o tres) eso de que las armas que Gadafi tiene y utiliza en contra de su propio pueblo fueron compradas a EEUU y Europa. Sí ya, algo es algo. Pero eso tampoco es todo.

No hace mucho, cuando todo esto comenzó, el problema era el petróleo. Casi lo único que nos preocupaba era el petróleo, su subida, su ausencia, su destino. Luego sí, la masacre de un pueblo que debe soportar morir a cambio de una ideología diferente, en manos de un déspota que si algo tiene, sólo son muchas armas. Entonces sí, todos llegamos a la conclusión de que algo hay que hacer para frenarlo. Pero ¿y el trasfondo? Porque el trasfondo y el problema siguen siendo el mismo: el petróleo. ¿O será simple casualidad que EEUU y Europa sean los principales importadores del crudo libio? ¿Porqué somos incapaces de creer que esas armas se vendieron sin saber, a ciencia cierta, las consecuencias? ¿Porqué somos incapaces de ver que esto no tiene nada que ver ni con la masacre del pueblo libio ni con la paz? ¿Qué es lo que nos hace creer que el pueblo libio no sigue siendo masacrado ni está muriendo a manos, ahora, de medio mundo?

Lo que sí me ha quedado muy claro es que Gadafi, amén de ser un delirante y un dictador, es bastante estúpido porque no ha hecho más que darle al primer mundo la excusa perfecta para plantarse allí y seguir destruyéndolo todo. Porque claro, decir que queremos su petróleo no es "políticamente correcto" pero decir que sólo queremos parar la masacre de ese pobre pueblo justifica cualquier acción, incluso la guerra.

Lo único que yo espero, desde mi humilde posición, y, a pesar de las mentiras que queremos creernos y los engaños políticos, es que la masacre acabe... aunque algo en mi corazón dice que recién comienza.

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